Joh 1:25 Y le preguntaron, y le dijeron: ¿Por qué, pues, bautizas, si tú no eres el Cristo, ni Elías, ni el profeta?
Joh 1:26 Juan les respondió diciendo: Yo bautizo con agua; mas en medio de vosotros está uno a quien vosotros no conocéis.
Joh 1:27 Este es el que viene después de mí, el que es antes de mí, del cual yo no soy digno de desatar la correa del calzado.
Juan el bautista hablaba del Señor Jesús. Debemos ser conscientes de lo que le Señor nos ha dado. El Señor Jesús - dice Juan - no bautizaba con agua, sino con el Espíritu Santo. ¡Que gran maravilla hermanos! Siendo malos, infieles, pecadores, de condicion poco noble, el Señor nos amó hasta la muerte y muerte de cruz y nos dió Su Espíritu que es Dios mísmo en nosotros.
Pues que lo tengamos en cuenta hermanos, que tenemos una gran responsabilidad de dejar que Dios haga Su obra en nosotros. Seamos fieles a Él y veremos como nos bendice de maneras que nunca podríamos haber imaginado.
Y si aun no crees en Dios y en que Jesús vino a salvarnos de nuestra condición de malicia ( o pecado), te digo que lo pruebes, que si buscas a Dios le encontrarás y que no es nada etereo o mágico, sinó que es algo muy real y que está a tu lado dia a dia.
Que el Señor os bendiga.
Amén.
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