(porque por fe andamos, no por vista);
pero confiamos, y más quisiéramos estar ausentes del cuerpo, y presentes al Señor.
2 Corintios 5:6-8
Lo que quiero remarcar hoy es la fe. Estoy hablando del versículo 7. Podéis leeros el pasaje entero de Corintios, ya que el contexto es un poco diferente de hacia donde yo quiero ir. En resumen el contexto de esa porción de la Palabra és que tenemos un cuerpo celestial preparado, incorruptible, y que es muy difrente al actual. Este cuerpo nuevo esta en los cielos y mientras estamos aquí, en este cuerpo de carne, esperamos ausentes del Señor, de Dios, porque estamos aquí abajo, en la tierra para que nos entendamos.
Lo que me gusta es que dice que estamos confiados siempre, porque tenemos esa confianza en Dios, que es una fe, ya que no vemos lo que esperamos. O sea que creemos sin ver. Y ahí es donde quería llegar, a la fe. Tener fe implica creer, aun sin ver, a veces también sin sentir (sin guiarnos por sentimientos sinó por convicciones) y en definitiva esperar lo que no se ve, tener la convicción de lo que esperamos sin tener una certeza visual pero si una certeza de fe.
La fe cuesta, la fe es arriesgada para el que no tiene mucha, sin embargo para el que confia plenamente en Dios la fe es preciosa. Aunque a todos nos cuesta (creo yo) tomar decisiones de fe, tenemos el don o la ventaja que Dios siempre está ahí para confirmar nuestros pasos de fe. O sea que no vamos a creer y luego simplemente ya está, sino que Dios está ahí para alentarnos y sostenernos en ese camino que sabe que nos es difícil y como el padre que premia al niño cuando hace algo bueno Dios está ahí para premiarnos en el camino correcto (con bendiciones, regalos, dones, etc.).
Así que no temamos en fe, creamos sin ver y acabaremos teniendo la certeza de que Dios está ahí, con nosotros, aguantándonos. Pues si nos acercamos a Dios Él se acercará a nosotros.
enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.
Mateo 28:20
Lo que me gusta es que dice que estamos confiados siempre, porque tenemos esa confianza en Dios, que es una fe, ya que no vemos lo que esperamos. O sea que creemos sin ver. Y ahí es donde quería llegar, a la fe. Tener fe implica creer, aun sin ver, a veces también sin sentir (sin guiarnos por sentimientos sinó por convicciones) y en definitiva esperar lo que no se ve, tener la convicción de lo que esperamos sin tener una certeza visual pero si una certeza de fe.
La fe cuesta, la fe es arriesgada para el que no tiene mucha, sin embargo para el que confia plenamente en Dios la fe es preciosa. Aunque a todos nos cuesta (creo yo) tomar decisiones de fe, tenemos el don o la ventaja que Dios siempre está ahí para confirmar nuestros pasos de fe. O sea que no vamos a creer y luego simplemente ya está, sino que Dios está ahí para alentarnos y sostenernos en ese camino que sabe que nos es difícil y como el padre que premia al niño cuando hace algo bueno Dios está ahí para premiarnos en el camino correcto (con bendiciones, regalos, dones, etc.).
Así que no temamos en fe, creamos sin ver y acabaremos teniendo la certeza de que Dios está ahí, con nosotros, aguantándonos. Pues si nos acercamos a Dios Él se acercará a nosotros.
enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.
Mateo 28:20
Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros.
Santiago 4:8a
Toda la gloria sea para Dios.
Que Dios os bendiga.
Que Dios os bendiga.
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