viernes, septiembre 04, 2009

Eclesiastés 5:13,14

Hay un mal doloroso que he visto debajo del sol: las riquezas guardadas por sus dueños para su mal;
las cuales se pierden en malas ocupaciones, y a los hijos que engendraron, nada les queda en la mano.
Eclesiastés 5:13,14

Volvemos hoy con las riquezas. Es un tema muy amplio el del dinero, el principio de los males dice en algún sitio que es el dinero y realmente muchas veces es así. Merece pues, este tema, una atención especial por nuestra parte.

¿Qué dicen estos dos versículos? pues que el dinero puede ser algo bueno, se puede usar para bien, por ejemplo para dejarselo a los hijos y que puedan empezar una vida independiente o les pueda ayudar con los múltiples gastos que conlleva el cambio de vida con los padres a la independencia. Es algo bueno cuidar de los hijos y el dinero también es algo necesario que los padres pueden proveer en algún momento dado. Pero la persona del versículo no hace eso, no mira por su hijo y al contrario, hace mal uso de su dinero. Lo derrocha en malas ocupaciones.

¿Qué conclusión podemos sacar de aquí? Pues que tener bienes materiales es lícito pero solo si tenemos claro que todo lo que tenemos nos lo ha dado Dios y por lo tanto es Suyo. Somos administradores, mayordomos de todo lo que Él nos da, para disfrutarlo y vivirlo pero sobretodo para darle gloria a Él.

Que Dios nos ayude a hacer esto realidad.
Amén

1 comentario:

Anwa Túre dijo...

www.no-prevaleceran.blogspot.com