Hay un versículo que dice:
“Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?” Jeremías 17:9
¿Quién lo conocerá? Ni uno mismo conoce a su propio corazón, pero Dios sí, hasta el último rincón. ¿Quién mejor puede conocerlo?, es triste que muchas veces nos resistamos y no se lo queramos entregar, o solamente de demos un pedazo. Preferimos controlarlo nosotros según nos convenga y de esta manera perdemos muchas bendiciones; y lo peor de todo es que entristecemos a Aquel que nos quiere hacer realmente felices.
Pero cuando entregas tu corazón a Dios, sin barreras, sin condiciones… sin importarte nada más que su único propósito para tu vida, todo lo empiezas a ver de otra forma… Te das cuenta de que Él lo está controlando todo y tú no estás haciendo nada para cambiarlo, y te sientes segura y confiada a pesar de que puedas estar pasando dificultades, o a pesar de que el camino que te indica Dios no sea el que tú querías.
Todo esto puede sonar muy bonito, pero ahora es cuando llega la hora de la verdad: “pero si yo le he entregado mi corazón y todo lo que soy a Dios. Cada vez que voy a hacer algo oro, y luego lo hago”
¿Pero alguna vez te has parado a escucharle?, ¿alguna vez has pasado tiempo en su presencia? Quiero invitarte a que entregues la llave de tu corazón a Dios, a que lo derrames delante de Él y te postres, pero hazlo sin barreras, sin condiciones, con Sinceridad y con Fe.
Por último dejaros con este versículo:
“Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; porque de él mana la vida.” Prov.4:23.
Amén
Selah! Mil Bendiciones!! ^^
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