martes, diciembre 01, 2009

Predicación en medio de tribulación

Hablando ellos al pueblo, vinieron sobre ellos los sacerdotes con el jefe de la guardia del templo, y los saduceos, resentidos de que enseñasen al pueblo, y anunciasen en Jesús la resurrección de entre los muertos. Y les echaron mano, y los pusieron en la cárcel hasta el día siguiente, porque era ya tarde. Pero muchos de los que habían oído la palabra, creyeron; y el número de los varones era como cinco mil.
(Hechos 4:1-4)

Hoy en el núcleo de gbu (grupos bíblicos universitarios) de Bellvitge hemos hecho Hechos 4:1-22. Y hay algo que me gustaria compartir con vosotros así que os voy a hacer un pequeño resumen.

Antes del capítulo 4, Pedro y Juan habían curado a un cojo en la puerta del templo de Jerusalen. Entonces se ponen a hablar i predicar la palabra de Dios y la resurrección de Jesucristo. Hasta que en el inicio del capítulo 4 se relata como vienen los poderosos y religiosos y les toman presos porque no les gusta que prediquen la resurrección de Jesús, ya que así les quitan el "negocio" que para ellos era la religión por aquellos entonces. Perdían el poder si la gente creía a otro, incluso aunque este otro fuera Dios, preferían crucificarle y seguir con su corazón duro como si nada.

Luego les ponen delante de todos los poderosos (a Pedro y a Juan) y les piden explicaciones. Yo aquí veo algo predominante. Hay una obra, una obra de Dios mediante el milagro del cojo y la posterior predicación, y luego también hay una oposición a esta obra, mediante los poderosos y religiosos de la época (fariseos, saduceos, Sumo sacerdote, la guardia del templo, etc.).

Pero lo que me gusta ver es, que por encima de todo esto, la obra del Señor sigue adelante. En el versículo 4 me ha impactado que aun y encarcelar a Pedro y Juan se convierten 5000 hombres. Esto me ha dado a entender que puede haber muchas trabas para la obra. para hablarle a las personas de Dios pero si nos dejamos guiar por Él y realmente es Él quien nos guía (que es siempre si le dejamos), su obra se va a cumplir, se va a convertir gente, vamos a plantar las semillas que tengamos que plantar, en definitiva, la obra de Dios va a continuar, porque Dios es más poderoso que Satanás y que todo este mundo. Es así de simple. Así que no nos desanimemos si vemos que nos cuesta hablar del Señor (que hay resistencia por parte del enemigo me refiero), si no vemos fruto, Dios está al mando de todo y hace Su obra en los corazones sinceros y humildes que hay.

Descansemos pues en Él y sepamos que sin Él no podremos hacer nada. Sólo es con Su Espíritu Santo y sus fuerzas con las que podremos hacer Su voluntad y seguir sirviéndole.

Todo sea para Su Gloria.
Y en el nombre de Jesús pues no hay otro nombre en el que podamos ser salvos.

Que Dios os bendiga :)

1 comentario:

Noemi dijo...

AmmmeeeeeeeN!!!