martes, septiembre 23, 2008

Cansancio

Mat 11:29 Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas.
Mat 11:30 Porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.

En el día de hoy me referiré al cansancio y no solo el físico, sinó también el espiritual.
Si leemos estos versículos nos dice que debemos llegar un yugo sobre nosotros para que descansemos. El yugo obliga trabajo, es evidente, por eso en estos versículos el Señor nos muestra una paradoja básica para la vida del cristiano.

El yugo del Señor es el de servirle y, solo, cuando llevemos ese yugo de servidumbre sólo a Él, podremos ser mansos y humildes de corazón, la cuál cosa provocará descanso sobre nuestras almas, ya que, como sabemos, la única libertad está en Él y esa libertad y a la vez protección bajo sus alas, nos hace descansar. El yugo que nos da el Señor hace ligeras todas las cargas y superables todos los problemas. Nos lo hace fácil por su muerte y resurrección, por gracia únicamente, así que hermanos, vivamos realmente bajo su yugo para que Él nos guie en todas las decisiones que tomemos.
Dios les bendiga

1 comentario:

Isma y Jordà dijo...

Verdaderamente así lo quiere el Señor,
preciosa reflexión hermano.