Siempre nuestro amparo es Dios

Dios es nuestro amparo y fortaleza,
Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.
Por tanto, no temeremos, aunque la tierra sea removida,
Y se traspasen los montes al corazón del mar;
Aunque bramen y se turben sus aguas,
Y tiemblen los montes a causa de su braveza. Selah

Salmo 43:1-3

Como aclaración previa querría comentar que el término "Selah" lo encontramos en los salmos y hace referéncia a un meditar, a un: "ahora que has leido esto para y medita en ello". Ese es su significado.


El pensamiento de hoy es muy cortito pero también muy refrescante y trae esperanza.
Nos dice el Salmista que Dios es el amparo y fortaleza nuestros, y que en las tribulaciones (problemas, preocupaciones, etc.) Dios es nuestro auxulio, nuestro pronto auxilio.
Que gozo y que alegría saber todo esto a cerca de nuestro Dios y además de saberlo poder practicarlo viendo como en nuestra vida cuando nos pasa algo así podemos contar con Dios y como Él nos da esta bendición de darnos consuelo, refugio, paz y fuerzas.

Sabiendo esto, sabiendo que somos hijos del Dios Altísimo (si hemos acceptado a su Hijo Jesús en nuestro corazón como salvador nuestro), que ha creado todo el universo y que es amor perfecto no debemos temer (el amor hecha fuera el temor, como dice la Biblia). Y aquí dice que aunque la tierra sea removida (terremotos) y aunque se muevan los montes hasta el mar (imaginémonos que hecatombe tan grande y que pequeños nos sentiríamos si vieramos una montaña "caer" al mar), pues aunque todo esto pase, nosotros no temeremos. Y esta confianza no es en vano, no es una confianza de "tonto" sino muy al contrario, es una confianza apoyada en la Roca, en el Único que nos la puede dar de verdad, que es Dios.

Y esto es algo que no se fureza en la vida de un cristiano, no es algo en lo que te has de esforzar, porque cuando crees en Dios ya tienes esta paz, esta tranquilidad que te da Él. Sabes que Él estará a tu lado pase lo que pase y eso es un gozo y una alegría tremendos y que nada ni nadie más te puede dar sino sólo Él.

Pues buscad a Dios y le encontrareis, acercaos a Dios y Él se acercará a vosotros. Él es fiel siempre, aunque nosotros no lo seamos.

Que Dios nos bendiga y nos ayude a ver todas estas inmensas bendiciones que Él nos proporciona.
amén