Hoy día chof, mañana volvemos a la universidad, al instituto, al trabajo, allá donde sea.
La entrada de hoy la haré yo porque supongo que Isma vendrá muy cansado cuando venga, así que, él ya actualizará mañana si Dios quiere.
Ayer, en la iglesia de Barcelona, me commovió un testimonio que dió Henri en la reunión de los símbolos. Se centró en estos dos versículos
Php 4:6 Por nada estéis afanosos; sino sean notorias vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con hacimiento de gracias.
Php 4:7 Y la paz de Dios, que sobrepuja todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros entendimientos en Cristo Jesús.
No voy a decir todo lo que dijo, simplemente me llamó la atención porque yo estoy pasando por una situación que tiene algo que ver. Él comentaba que estaba atribulado, se encontraba mal, no tenia paz, no podia descansar bien pero, el lunes leyó estos versículos, juntamente con algunos de Marcos y le marcaron. Oró como nunca antes lo había hecho y le pidió al Señor que le quitara toda la carga que tenia, que le diera paz. Henri le daba todas sus cargas al Señor. Lo hizo y tuvo paz, y, decía, sigo igual de preocupado por las cosas, pero hay una cosa que no es lo mismo, yo tengo paz, antes no la tenía.
Un saludo para todos y que Dios, en su buena voluntad, os bendiga
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