lunes, julio 21, 2008

Firmes y adelante con gozo y paz

Php 4:1 Así que, hermanos míos amados y deseados, gozo y corona mía, estad así firmes en el Señor, amados.
Php 4:2 Ruego a Evodia y a Síntique, que sean de un mismo sentir en el Señor.
Php 4:3 Asimismo te ruego también a ti, compañero fiel, que ayudes a éstas que combatieron juntamente conmigo en el evangelio, con Clemente también y los demás colaboradores míos, cuyos nombres están en el libro de la vida.
Php 4:4 Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos!
Php 4:5 Vuestra gentileza sea conocida de todos los hombres. El Señor está cerca.
Php 4:6 Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.
Php 4:7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.

Hoy no estaba muy bien en el Señor y busqué esta porción de la Palabra y me fué de gran aliento.
Como muchos de vosotros ya sabéis, esta es una carta que Pablo hace a los Filipenses, una iglesia que él plantó gracias al Señor. El capítulo cuatro es el último de la carta y Pablo da unas indicaciones para la unidad de los hermanos.

Primero Pablo nos exhorta a estar firmes en el Señor, no desmayar, no caer, aun con las dificultades, estar siempre al pie del cañón fieles al Dios de nuestra salvación.
Después de dar unas indicaciones a hermanos en concreto llega el versículo cuatro. Puede sorprender el fervor o la pasión con que Pablo dice que nos regocijemos. Lo repite hasta dos veces, y la segunda lo hace con signos de exclamación,osea, más fuerte. Un corazón completamente entregado al Señor y que se mueve y vive por Él, está continuamente regocijándose en Dios, porque se da cuenta de la realidad espiritual de este mundo y de la realidad que el Señor nos ha dado en lo que se refiere a la salvación y al Espíritu Santo. Así que si queremos regocijarnos en el Señor sólo tenemos que acercarnos más a Él para entender más,conocer más, y así saber lo afortunadisimos que somos.

El siguiente versículo que me llama la atención es el seis. Que versículo tan importante, tan clave para nuestra vida. Los principales problemas de los humanos se basan en sus afanes, sus derrotas, sus problemas en definitiva. Pero el Señor através de Pablo nos dice aquí que no estemos afanosos por ningún problema, que los problemas no ocupen todo nuestro corazón y estemos desesperados porque no podemos solucionarlos, que no estemos afanosos aunque algo muy grave nos pase.

Esto es un gran consuelo. Cuando tenemos problemas fuertes, grandes, o quizás pequeños, no debemos estar desesperados o inquietos, simplemente esperar en el Señor con fe y confianza en que Él lo controla todo y sabe por donde tienen que ir las cosas. Verdaderamente es un gran consuelo que yo mismo no he encontrado en ningún otro lugar, saber que el Señor está por encima de todo y lo controla absolutamente todo.

Pero esto no es magia. Pablo nos dice el camino a seguir cuando tengamos afanes que llamen a nuestra puerta. Dice que debemos poner todas nuestras peticiones en las manos del Señor en oración y rogando a Él dándole siempre las gracias. Y entonces nosotros tendremos paz y el Señor tenrá via libre (porque le habremos abierto nuestro corazón) para guiarnos por dónde Él quiera.

Y el siete ya es la gran culminación. La paz de Dios, que increible que Su paz esté en nosotros. Que tantas veces le hemos dejado de lado, sólo con pedirle perdón y poner todo nuestro ser en Él, conseguimos esa paz que es tan maravillosa y tan grande. Gracias al Señor por este don tan grande. Finalmente también dice que nuestros pensamientos serán guardados junto con nuestros corazones.Que magnificos versículos.
Que el Señor os bendiga.

Amén

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