Ayer tuvimos reunión conjunta de jóvenes que fue de mucha bendición. Personalmente necessitava una reunión así para fortalecerme.
Hay dos versículos de los que nos hablamos, el primero es este de cantar de los cantares que está en el título. Pensemos en el momento en que el Señor dirá levántate hermosa mía (iglesia) y vente o cuando nos dirá a cada uno de nosotros, levántate y vente porque tu hora ha llegado. ¿Que le diremos? ¿estaremos preparados para ese momento? tal como dice la Palabra, ¿estaremos orando y velando?
El segundo versículo es:
ASI que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable á Dios, que es vuestro racional culto. (romanos 2:10)
Nuestros cuerpos deben ser presentados, ¿por qué? porque no son nuestros cuerpos, solo los tenemos de prestado. ¿Como debe ser esa presentación? cuando presentamos un trabajo queremos que esté lo mejor hecho posible ¿verdad? pues esta presentación debe ser en sacrificio vivo (tal como dice la Palabra si alguno quiere venir en pos de mi niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame). Necesitamos negarnos, no ya yo, tal como dice Pablo en Gálatas. No somos nada, todo es tuyo Señor, úsame según Tu voluntad y que no haya nada de mi voluntad en la vida que tu me has dado. Un sacrificio santo, este ejemplo está en la oración, como vamos a orar si no nos arrepentimos de nuestros pecados, debe haber santidad en nuestras vidas para que la oración realmente sea escuchada.
Que pensemos esto, que escuchemos la voz del amado que nos dice levántate y ven y que en nuestra vida pueda haber esa negación de nosotros mismos.
Dios os bendiga
No hay comentarios:
Publicar un comentario